miércoles, 5 de abril de 2006

La canción hipnotizadora

Érase una vez un pequeño niño que se llamaba Andrés, que quería un disco de Juanes y encontró uno nuevo y muy bonito y se lo compró. Lo único raro que encontraba era que le había costado muy barato, ya que decía $ 5.000 en la lista de precios pero sólo pagó $ 2.590 por él, pero igual se lo llevó, aunque le seguía pareciendo raro.

Cuando llegó a su casa lo quería escuchar altiro, pero cuando lo abrió descubrió que estaba rayado, vió las canciones en el estuche y descubrió que la última canción también estaba rayada, pero por curiosidad se puso a escuchar esta última canción.

Estaba muy desafinada, pero igual la escuchó completa y al final de la canción Andrés se hipnotizó y empezó a hacer puros males en la casa y la mamá para castigarlo le rompió el disco y Andrés despertó; le pidió perdón a su mamá y nadie más sufrió esa maldición.

3 comentarios:

Gonzalo Araya dijo...

No me gustaría encontrarme con una canción así. Además, como no me gusta mucha Juanes, estoy a salvo.

Un beso

Anónimo dijo...

Caballero no es por menos preciar su pluma pero... ¿QUE TE FUMASTE PARA ALUCINAR ESOS CUENTOS? :b

Anónimo dijo...

I truly believe that we have reached the point where technology has become one with our society, and I am fairly certain that we have passed the point of no return in our relationship with technology.


I don't mean this in a bad way, of course! Ethical concerns aside... I just hope that as technology further develops, the possibility of copying our brains onto a digital medium becomes a true reality. It's one of the things I really wish I could encounter in my lifetime.


(Posted on Nintendo DS running [url=http://cid-2602f0e287041cef.spaces.live.com/blog/cns!2602F0E287041CEF!106.entry]R4 SDHC[/url] DS ComP)