
Un día creo otro experimento y cuando lo terminó abrió la tapa que tenía puesta para que no salpicara cuando batiera la botella en que hacía sus experimentos, y salió un olor tan repugnante que atrajo a todas las moscas que estaban merodeando por ahí y de inmediatamente su casa se lleno de millones de moscas, entonces su mamá lo castigó si hacer experimentos por dos años mientras espantaba a todas esas asquerosas moscas, un año después seguían millones de moscas todavía y apenas los dos podían dormir por el sonido que ocasionaban las moscas, y un día especial en donde estaban de remate unas muestras de insecticida que se llamaba “Contra moscas ultima generación”, y la mamá compró de inmediato 10 muestras y las echó en toda la casa, al tiro se murieron y se le acabaron al tiro las 10 muestras y el niño siguió castigado por otro año, y le dio tanto miedo hacer más experimentos que cuando pasó el año del castigo no siguió haciendo más experimentos por toda su larga vida.