domingo, 9 de septiembre de 2007

La comida mágica

Había una vez un niño que se llamaba Glotin que le encantaba comer todo lo que veía, además Glotin era chef y sabía cocinar de todo, comía pan trucas, todas las legumbres, arroz, carne, etc. pero un día quiso cocinar una comida totalmente nueva para probarla y ojala que le gustase a él y a todo el mundo, y empezó a cocinar, mezcló pan trucas, porotos, carne, arroz, tallarines, y millones de cosas más, pero no se dio cuenta que adentro de su comida le cayó una mosca radioactiva que le puso de un color extraño pero no le importó, porque solo quería probarla, luego cuando terminó de revolver después de tres horas se decidió a probar su comida, y le gustó tanto que le dio de probar al mundo entero esperando que a todos les gustara, y efectivamente a todo el mundo le encantó, pero no sabían que por la culpa de esa mosca radioactiva la comida tenía efectos secundarios, eran que en 24 horas la gente moriría por culpa de esa comida.

Luego de 23 horas, solo faltaba una hora para las 24, la gente se empezó a sentir mal y sentían que iban a explotar, y como Glotin se acordó de el color extraño de esa comida y pensó que todas las personas que habían probado se exquisita comida iban a morir por esa razón y entonces empezó a hacer un antídoto, y tenía un frasquito que decía “antiradioactividad”, y Glotin solo rezaba porque la radioactividad fuera la causante de todos los malestares, de las personas, y lo echó a una comida cualquiera que le gustara a todas las personas que habían probado su exquisita comida, se demoró 40 minutos exactos e preparar la comida extraña, pero justo alcanzó a repartirla en todo el mundo, y justo cuando quedaba un minuto para las 24 horas todos los que habían comido su comida extraña se sanaron y ya no sentían malestares, ni que iban a explotar, ni nada y Glotin aprendió a no cocinar cosas raras porque pueden ser malas y a no comer tanto porque le puede hacer mal, y Glotin vivió feliz para siempre.