sábado, 17 de diciembre de 2005

El huevo cohete mágico

Después de un millón de años, la tierra había evolucionado por completo, como por ejemplo los árboles eran más grandes que un edificio de 1000 pisos y las palmeras eran el triple más grandes que el árbol, también las personas habían crecido mucho más en vez de medir 2 metros mas o menos median 30 metros y miles de cosas más, pero como en los años 1500 y 2000 ya se sabía que en un millón de años después se iba a apagar la luz solar, y en ese mismo día se había apagado el gran sol y se formó un hoyo negro en el espacio que se comería todo lo que ahí en el espacio pero antes de eso se había construido un huevo cohete capaz de viajar a la velocidad de la luz y hasta transportar más de un diez mil personas de 30 metros. Se subieron hartas personas y viajaron a la velocidad de la luz a otro sistema solar bien diferente, como donde haya un sol que durara por toda la vida. Viajaron hasta encontrar un planeta llamado “huevolandiamágico” en ese lugar no había vida pero se podía respirar, era como la tierra pero deshabitada, sin ningún edificio ni nada.

Pasaron un par de días, algunas personas verificaban si había agua y buena tierra para plantar los árboles y encontraron todo. Con la evolución de las personas construían todo para vivir en dos segundos o menos; vivieron todos en 10 edificios con todo hasta tele y cable para que vieran lo que quisieran a cualquier hora, lo malo es que un planeta se salió de orbita, explotó y los meteoritos se fueron en contra del planeta habitado “huevolandiamágico” y habían temblores cada 10 segundos pero como el planeta era tan duro y firme casi ni se sentían los temblores y entonces vivieron todos muy felices para siempre.

lunes, 5 de diciembre de 2005

Las cartas mágicas

Hoy día me compraron un juego de cartas mitos y leyendas muy bacán, yo jugaba todos los días con mis amigos y les ganaba hasta que un día del cartucho descubrí una parte que se abría y cerraba y entre medio de esa parte una frase que decía “Leyendas y Mitos salgan a atacar el mundo y domínenlo”, lo leí en voz alta y el cartucho se empezó a elevar y se rompió de tan grandes criaturas que salían de él, de pronto empezaron a derrumbar edificios tras edificios y yo harto de eso le pedí a un compañero que me prestara su cartucho para ver si tenía el mismo papel que yo, lo abrí y si lo tenía, lo leí de nuevo y acompañada de esa frase dije “Hagan lo que yo les diga”. Salieron miles de monstruos y todos al mando mío los hice que pelearan con mi propio mazo pero lamentablemente no le pudieron ganar, entonces se me ocurrió otra idea, decir otra vez la misma frase a ver si esas criaturas volvían a ser simples cartas. Y así fue.

Pero lamentablemente la gente quiso que esas cartas desaparecieran para siempre y yo con mis amigos tristes y aburridos, pero yo me acordé que había guardado 5 mazos y se los di pero obviamente sin esos papeles con las frases malas que liberan todas las cartas y destrozan todo y también les puse la condición que no se las prestaran a nadie más y no se las mostraran a nadie por muy confiable que sea incluyendo a los papás.