martes, 12 de abril de 2005

El cuento de un fantasma muy triste

Había una vez una familia que vivía sola con su hijo, un día decidieron cambiarse de casa y se cambiaron a la casa del "Fantasma muy triste". En la primera noche los papás antes de dormirse escucharon un lloriqueo, entonces fueron a ver al niño pero el ya estaba dormido, siguieron escuchando lloriqueos en la sala de arriba y fueron a ver, subieron pero tampoco encontraron nada, después escucharon lloriqueos en su pieza y otra vez, nada y como no escucharon nada más se fueron a acostar.

Un día, encontraron en la casa una pieza oscura y desconocida, nadie entraba hace 5 años a ese lugar. Entraron, y todo estaba lleno de arañas de rincón, miles de telas de arañas, por lo menos 50 bichos, entonces llamaron a un exterminador de bichos que era amigo de ellos y traía un guardapolvo (cotona o delantal) para que no se ensuciara porque además de haber tantas arañas y 50 bichos, había mucho polvo. Cuando el exterminador estaba limpiando, escuchó un lloriqueo y pensó que era el niño de la casa y fue a ver pero no era él. Cada vez sentía el lloriqueo más fuerte como si fuera acercandose. El exterminador no tuvo miedo y siguió con su trabajo.

Después de una hora la pieza quedo muy limpia pero sucedió algo terrible, cuando terminaron de limpiar el niño se murió porque el espíritu de esa pieza había hecho una maldición. Todos quedaron muy tristes.

Por: Diego Araya Reydet

2 comentarios:

Shinnosuke dijo...

o x yus!!!! q triste!!!!


O_O"

Anónimo dijo...

feooo!