domingo, 11 de junio de 2006

El túnel interminable

Un día cuando yo estaba en el colegio con mi mejor amigo inspeccionando las bodegas antiguas, entramos a una que no tenía fin, esta es la historia:

Ayer entramos a una bodega muy rara y oscura, tenía muchas telas de arañas he incluso se escuchaban voces muy despacio, al fin del túnel pero nunca llegamos…

Sentimos un portazo como a la mitad del viaje y seguimos avanzando, después nos detuvimos un poco y sentimos unos pasos que se hacían cada vez más fuerte, nos asustamos y echamos a correr y como nos cansamos tanto paramos y fuimos a dar a un lugar que tenían tres puertas y si no elegíamos la correcta no podríamos salir nunca de ahí entonces decidimos que yo entraría en la segunda y mi amigo en la tercera, yo entré y salí a la puerta del colegio, mi amigo entró y raramente salió a la puerta del colegio también, entonces después descubrí que mi supuesto amigo que había salido con migo en la puerta era un clon de el pero un clon malo y tuve que entrar otra vez a ese túnel, entre con una cuerda y corrí otra vez y llegue otra vez a las tres puertas, entonces abrí en la que estaba mi amigo y lo logré sacar a mi amigo y rápidamente nos fuimos a la segunda puerta para poder salir y deshacernos para siempre de ese clon malévolo de mi amigo.

3 comentarios:

Elisa de Cremona dijo...

y qué había en la otra puerta!!
me dejaste con la intriga!!!

Jaime Ceresa® dijo...

Pucha..al igual que la elisa..me quede metido con la otra puerta..y ese clon malo...que lata el tipo.

Un abrazo campeón.-

Gonzalo Araya dijo...

¿Y cómo se deshicieron de ese clon malévolo? Que bueno tu cuento Dieguito, me gustó mucho.

Un beso de Papá